(Escuchando de fondo “Rezaré” de Silvio)

POR ERNESTO LÓPEZ DE RUEDA

VAMOS A QUERERLO UN POQUITO MÁS, TÓS POR IGUÁ

Reza el artículo primero de la Constitución del Fútbol que: “el público es soberano y puede protestar, criticar y pitar cuanto guste en el momento que elija”. Y quien suscribe, en la plaza particular de mi corazón y entendimiento declaro el estado de sitio y excepción suspendiendo dicho precepto durante cinco semanas, hasta la fecha del 23 de mayo.

Quienes amamos al Sevilla, sabemos que está para quererlo, pero ahora, más todavía. Cuando flaquean las fuerzas y se nublan las entendederas es cuando su gente acudimos a las trabajaderas, sin esperar a que nos llamen ni preguntar porqués, a ofrecer la cerviz para descargar sus rodillas y que éstas resistan sin doblarse echando sobre nuestros hombros el gigantesco peso de su historia labrado y tallado milímetro a milímetro, pena a pena, sufrimiento a sufrimiento y gloria a gloria y laminado por el pandeoro de generaciones.

Por eso, porque para nosotros es devoción ancestral, sabemos los mimos a procurar, los detalles a respetar como observadores de una herencia transmitida y recibida donde cada cual conoce su puesto y lo ocupa sin estridencias, silente y si falta hiciera, doliente. Vas a quererlo más porque eso, sin palabras, te enseñaron tus padres o abuelos mientras te acariciaban cual cachorro en los días en que llovía y nunca salíamos.

Que si hasta hora el itinerario presenta yerros, que si en la cuadrilla titular fallaron los pateros, que si la Junta de Gobierno y el capataz cometieron errores, eso a 19 de abril poco debiera importarnos, sí que anuncian chaparrones y el Señor de Andalucía corre el riesgo de meterse en un callejón sin salida y para llevarlo a refugio o penar con él no le faltará, nunca lo hace, nuestra multitud, nuestro gentío. Escudo, bandera, afición.

Y por eso, desde ya, y corrida la voz del “vamos a quererlo un poquito más”, preparáis los aprestos y formáis las cuadrillas en pueblos y villas desde el Aljarafe hasta las sierras, en vega y campiña y en los barrios y collaciones de Sevilla a las que se acogen todas las que vienen desde fuera. Todas preparadas para juntas y en relevos, levantar a nuestro equipo en su tránsito por calles y callejuelas sabiendo que si mil levantás hicieran falta, sobrarían trabajaderas.

Ya estamos igualaos, unos costeros, fijadores y corrientes otros. Ya estamos ensayaos porque hemos recorrido calles y plazas de toda España y Europa desde hace 126 años bajo los sones más sevillanos mostrando el poder del Sevilla, qué poderío y qué bravura, cuánta desmesura cuando de amor se trata. Porque cuando flaquean sus fuerzas, lo rodean los amores del alma y lo levantan la fuerza de nuestros corazones.

Vamos a escuchar que llegó el a ésta es, a pulso y siempre de frente, queriéndolo un poquito más, a ver cómo se nos da esa entrada que ya sea en noche clara o borrascosa, será entre los clamores de su gente, la que eternamente está ahí, la que siempre lo quiere un poquito más y trabaja hasta el último suspiro para que todo salga sin desfallecer pese a los tropezones. Al martillo, a la voz, tós por iguá, al Cielo con él.

@NODOSFC