El sueño de Adriano
by alvayanes • 19 noviembre, 2019 • Fútbol, Sevilla, Sin categoría
(Escuchando de fondo «The greeting song» de Red Hot Chili Peppers, en el 57 cumpleaños de Chad Smith)
Los resultados de una encuesta realizada en las Universidades vascas depararon un impactante resultado: el 47% de los sondeados no sabían quién fue Miguel Ángel Blanco. Netflix está haciendo pruebas sobre lo que llaman «velocidad de reproducción variable» de tal forma que puedas ver la serie mas rápido de lo que es en realidad para, así, poder engullir más en el mismo tiempo -por ejemplo, si vas a x2, te tragas en media hora un episodio de una. Ya los matices, si eso, para otro día-. La NBA está probando fórmulas (reducir los descansos, que haya un tiro libre en vez de dos, quitar un minuto por cuarto) para que los partidos sean mas cortos. Y así, mil ejemplos.
El mundo actual se rige por la inmediatez. Por la celeridad. Por la falta de análisis en profundidad ya que hay mil cosas que hacer. Por el olvido del ayer porque me ocupa sitio para lo de mañana. Probablemente usted haya llegado hasta aquí haciendo una lectura diagonal que le habrá llevado 5 segundos a lo sumo. Esto es una cuestión objetiva, sin entrar a mas consideraciones; no vean en esta exposición el sesgo de considerar que cualquier tiempo pasado fue mejor sino unas simples reflexiones vitales sobre el tiempo que nos toca vivir.
Si hiciéramos una encuesta en las Universidades sevillistas, seguro que todos conocerían a Adriano Correia pero me da a mi que menos del 47% de los sondeados no sabrían que la filosofía emanada por el jugador mas ambidiestro que jamás vi allá por febrero de 2006, fue una revolución. El millenial o centenial sevillista las vería normal, pero aquello rozó lo delirante para los que por aquellas fechas ya teníamos lustros palanganas a nuestras espaldas. A mi eso que pasó ayer no se me olvida por mucho que mire al mañana. Venía el Sevilla de ganar 0-1 en Moscú al Lokomotiv en el partido (sin exagerar) tal vez con mayor frío de toda su historia tras gol de Jordi López. Y antes de la vuelta, va Adriano y suelta que están capacitados para llegar a la Final y traerse el título para el Sevilla. ¿El Sevilla un título, Adriano? En la fecha de esas declaraciones, el último título databa de 1948. Al igual que se dice que el trío Federer, Nadal y Nole se han cargado, no al resto de su generación de tenistas sino a la siguiente, el erial sevillista se estaba cargando no a la Generación nacida a mediados del siglo XX sino a la siguiente. A la generación del Gol de Poyet (quien estuviera en la grada del RSP en la Copa 93/94 sabe de qué le hablo), como a mi me gusta(ba) llamar a la mía. Un Sevilla de casi 60 años de sequía, que nunca había jugado unas semis europeas, se iba a traer un título europeo. Claro, hombre. Con dos cojones, Adriano.
Pero va y resulta que aquello no era una ojana sino se lo empiezan a creer. Va y resulta que el equipo es una máquina. Va y resulta que el equipo sale a la verdad todos los partidos. Va y resulta que nos lo empezamos a creer. Nosotros. Y en la 2005/2006 pues…qué les voy a contar que no sepan. Después de las declaraciones de Adriano vino el Palop por Notario en Lille. El Alves de 9 en San Petesburgo. Llegó el Schalke, con la sangre de Kuranyi y Antonio Puerta. Y Eindhoven, claro. Con Adriano Correia Claro. Mira qué contento.
web sevillafc.
Tropa. Este Sevilla es una máquina que va de verdad a todos los partidos. Solo ha ido abajo en el marcador un 11% de los minutos jugados y salvo el partido del Madrid, no ha sido inferior a ninguno de los 15 rivales con los que se ha enfrentado este año. Monchi ha pergeñado un equipo donde se unen chavales con hambre de una progresión evidente y un nivel difícilmente mejorable (Koundé, Diego Carlos, Reguilón, Ocampos….) con veteranos como Fernando, Navas o Banega que ya no pueden jugar mejor al fútbol. Y con ellos, un Lopetegui que nos está dando un zas tan bestial como maravilloso a los que vimos con recelo su llegada.
Nunca lo creí ni con Emery por la tiranía reinante, ni con equipos que fueron líderes como los de Sampaoli o Machín, los cuales eran vistosos pero denotaban cierta endeblez. No he visto nunca un equipo del Sevilla que, desde el minuto 1 de la pretemporada, tuviera la solidez del que ha montado Lopetegui. Y qué quieren que les diga. Esto está para decir lo que uno cree y a ti te encontré en la calle. Es la segunda vez en mi vida que lo pienso. La primera vez lo conseguimos de verdad, pero un petardo en Tarragona y una tarde mallorquina ya para siempre en los anales de la ignominia arbitral, mató el final feliz del sueño. Y ahora, por segunda vez en mi vida, lo creo.
¿Por qué no se puede pelear? ¿Existe algún imposible para ti, Sevilla? De los, no sé, 200 o 300 campos en los que ha jugado el mejor entrenador del mundo, el tuyo es el mas odioso. ¿Habrá un mayor elogio?
¿Quién sabe? Despejen su mente y sueñen como Adriano.