El sentido de la tradición
by alvayanes • 24 julio, 2016 • Fútbol, Sevilla • 5 Comments
(Escuchando de fondo “You know I’m No Good” de Amy Winehouse en el 5º aniversario de su muerte)
Mi padre observaba el sorteo inicial casi con la intensidad del partido y si todo iba “con normalidad”, no decía nada. En cambio, si el contrario ganaba el mismo y decidía cambiar de campo -cosa que ocurría generalmente cuando el capitán visitante o el entrenador era un ex nuestro- soltaba la siguiente frase lapidaria.
“Ojú. Bajío gordo”
Esto no era cosa exclusiva de mi padre. Ya no ocurre, pero el murmullo generalizado cuando perdíamos el sorteo inicial y había cambio de campo es una de las tradiciones sevillistas que se ha perdido como tantas otras, verbigracia la marcha Radetzky del descanso o pitar la salida del equipo tras ominosa derrota a domicilio. Yo ni murmullo ni soy supersticioso, pero reconozco que involuntariamente sigo torciendo el gesto cuando nuestro portero empieza el partido con los Biris a la espalda.
Foto ASR Pepe Brand
El Sevilla ocupa el banquillo de la derecha (zona preferencia, más pegada a Gol Sur), saltando al campo por ese lado. ¿Hay alguna razón para que se cogiera ese banquillo y no el otro? Para ello acudí a Enrique Vidal (@ayhsevillista), buen amigo, autor del libro sobre Enrique Lora y oráculo para tantas cuestiones sevillistas.
Al principio pensé que era para tener cerca al linier de preferencia. Recordar que la única vez que el banquillo del Sevilla residió excepcionalmente en la izquierda fue en época de Espárrago, que no quería el juez de línea al lado. A sensu contrario, se podría pensar que si hace decenas de años se eligió el de la derecha sería para tener más cerca el linier.
No obstante, Enrique estima que la razón puede ser el gusto del arquitecto a la hora de construir estadios. Efectivamente, el arquitecto del Ramón Sánchez-Pizjuán fue Manuel Muñoz Monasterio, con Antonio Delgado-Roig (muchos años socio nº1) como jefe de obra. Este señor fue el mismo arquitecto del Santiago Bernabéu que, aunque ahora ha cambiado, antes tenía los banquillos en el lado derecho. En la famosa final de Copa entre el Real Madrid y el Castilla se ve a los jugadores del primer equipo con los banquillos en similar ubicación a la sevillista. De igual forma, Muñoz Monasterio también fue el arquitecto del original Ramón de Carranza, donde los banquillos estaban también saliendo a la derecha como parece demostrar algunos trozos de este vídeo de infausto recuerdo del torneo donde se cargaron a Enrique Montero.
Una tercera opción más banal es, simplemente, que para un lado tenía que estar. Se eligió la derecha como se pudo poner el de la izquierda. He mirado varios estadios y no hay norma fija. Por decir algo, Camp Nou tiene el banquillo local a la izquierda y Mestalla a la derecha.
Por su parte, en otros campos se elige para donde atacar primero dependiendo el sol, pero en el del Sevilla no pasa eso ya que en la elección para donde empezar no influye la posición del astro rey debido a la orientación del Estadio. Efectivamente, el Sánchez-Pizjuán tiene la orientación “perfecta” ya que, aunque a Gol Norte le da un poco más de frente y se podría comentar algún matiz dependiendo de la hora de inicio del choque, no tiene mucha incidencia en realidad ya que el sol sale por el este (Fondo) y se pone por el oeste (Preferencia) de ahí que el juego de sombras y sol es prácticamente indiferente a estos efectos. Entonces ¿por qué históricamente el Sevilla empieza atacando para Gol Norte? Tal vez sea por “comodidad”: como el banquillo está a la derecha pues empezamos por el lado natural por el que salimos. Pero ¿puede haber algo más? ¿Esto se sigue haciendo o es otra de las tradiciones perdidas? ¿Tiene alguna influencia empezar para un lado u otro? Mi padre y demás “murmullantes” ¿llevaban razón por inquietarse cuando se rompía la tradición? ¿Es todo una superchería?
Natxo Palacios-Huerta, Catedrático de Economía de la London School of Economics ya ha salido en el blog alguna vez. Sus teorías científicas y la aplicación futbolera de Nash fueron adaptadas a las tandas de penaltis (¿lotería? Claro hombre….) que coadyuvó al Sevilla de Emery y Javi García para traerse la Copa de Turín, tal y como explicamos en el “Fuerte y al lado natural”. Pero el profesor Palacios-Huerta tiene varios trabajos más vinculados al fútbol como, por ejemplo, ser el encargado de realizar la reasignación de sitios de los socios en el traslado del viejo San Mamés al nuevo. Para ello realizó un trabajo teniendo en cuenta que uno de los graderíos iba a estar vacío un tiempo, tomando como referencia Vallecas, donde detrás de una portería no hay gente, analizando los resultados en la portería que están los Bukaneros y la otra vacía, haciendo el trasunto a San Mamés. En este fantástico post de @FermindelaCalle se explica con más detalle
Foto Sevilla FC
El Ramón Sánchez-Pizjuán no tiene fondos vacíos. Además, los dos goles tienen la misma capacidad y están siempre prácticamente llenos, por lo que debiera ser indiferente en teoría atacar antes para un sitio que para otro. Pero no es menos cierto que la grada más animosa se encuentra en la zona baja de Gol Norte, por lo que se podría hacer un estudio parecido, hilándolo con el hecho de que históricamente el Sevilla empieza atacando para Luis Arenas Ladislao. Teniendo en cuenta que los resultados se deciden al final del segundo tiempo, me van a permitir que meta todas estas ideas en la batidora y reflexionemos sobre el particular. Repito ¿Llevaba razón mi padre, la historia y la tradición sevillista cuando pensaba(n) que era mejor atacar para Gol Norte primero? ¿Qué porcentaje de puntos hemos sacado dependiendo la zona de ataque?
Lógicamente cuanto más amplio sea el estudio y más partidos abarque, más fidedigno queda el mismo al tamizarse el inevitable efecto azaroso. Además, y por las cosas de los sorteos, puede ser que hayas elegido un año atacar para un lado en los partidos más difíciles por lo que las conclusiones quedarían desvirtuadas. Mi estudio es corto, pero da para hacerse una idea básica; en el realizado, me he limitado a los partidos ligueros de las tres últimas temporadas. Los resultados son estos.
En estas tres temporadas hemos jugado 57 partidos en casa. De haberlos ganado todos (3 puntos en juego) hubiéramos sacado 171. En estas tres temporadas hemos obtenido 122 de los 171, marcando 116 goles de los cuales 59 han sido en la portería de Gol Norte y 57 en la contraria. Por tanto, la primera conclusión es que anotamos igual para un sitio que para otro por lo que no hay diferencias para la portería a la que atacar.
Los partidos que hemos empezado atacando para Gol Norte han sido la inmensa mayoría, concretamente 44 de los 57 (77,2%), por lo que la segunda conclusión es que la tradición en ese sentido se mantiene intacta. De los 132 puntos en juego de esos 44 partidos hemos logrado 90, lo que supone el 68,18% del total en disputa.
Los partidos que hemos empezado atacando para Gol Sur han sido mucho menos, concretamente 13 de los 57. De los 39 puntos en juego de esos 13 partidos hemos logrado 32, lo que supone el 82,05%. Y esta es la tercera y, tal vez, más destacada de las conclusiones.
Como dije antes, la muestra es pequeña al ser solo tres temporadas. Tal vez el hecho de que sean bastante mejor los porcentajes cuando empezamos atacando para el Sur viene influenciado por el hecho de que las muestras pequeñas suelen “tergiversar” la realidad (por si alguien quiere profundizar sobre la “Ley de los pequeños números” esta colaboración colussokukletil sobre Palencia, el mejor porcentaje en la historia de la liga). Pero, a riesgo de ello, si podemos rematar con el siguiente aserto: si usted es sevillista añejo de los que un cambio de campo en el sorteo no le hace gracia, desterre la idea. No solo no parece peor el realizar el cambio sino que la estadística de estos últimos años nos favorece en esos partidos donde perdemos el sorteo.
Seguiré recabando datos en el futuro para hacer un estudio más profuso en temporadas venideras.
Yo también me agobiada si nos quitaban el campo en el sorteo. También antes era para mi absolutamente te muga que hubiera foto de niños. Eso era tragedia para mi. Sin embargo ahora como hay en el 80 por ciento de los partidos ha dejado de ser relevante incluso para mi.
Mufa quise poner, palabra que me enseñó Bilardo y que significa gafe.
Una vez escuché a un exjugador (no recuerdo quién) decir q siempre era mejor atacar en la segunda parte hacia la portería de los Biris, porque en el segundo tiempo es cuando más cansados están todos y el ver de frente a la gente animar te da fuerzas para empujar cuando ya andas justo
Otro asunto que solía dar bajío era cualquier tipo de homenaje previo y si era con saque de honor ya… Difícil sacar estadística de eso
Cuando era pequeño, mi abuelo solía decirme que la portería de gol sur le decían la «portería de los goles» desde que SFC jugaba en el campo de Nervion. Estadisticamente quizás no sea cierto, pero el tema de la portería viene de lejos