Babá
by alvayanes • 13 marzo, 2013 • La firma invitada, Sevilla • 13 Comments
POR J.FELIX MACHUCA
(Fuente: as.com)
Al Sevilla que nos une en comunión de fieles futbolísticos se le marcharon, en estos años últimos, una serie de perfiles deportivos instalados en la excelencia. Sus hijos pródigos. Los magos de nuestra fantasía. Desde Dani Alves a Poulsen; desde Keita a Luis Fabiano; desde Adriano a Kanouté. Todos ellos, juntos con otros más que olvido por cuestión de espacio, formaron un grupo humano y deportivo difícilmente repetible. Yo diría que casi imposible volver a reunir una gavilla del prestigio y la contundencia de aquella armada invencible. Vendrán otros que lo sustituyan y quieran emular con su trabajo la dimensión inabarcable de tanta excelencia. Es posible que nazcan y vengan para seguir agrandando el camino abierto por los mejores. Pero les aseguro que no será nada fácil. Y que si ocurre no será pasado mañana.
Uno de los que vinieron para empezar a aliviar la nostalgia infinita que provocan las ausencias definitivas ha sido Babá. Un jugador de la liga portuguesa, realizador efectivo en aquel fútbol pero que, aquí, en la española, no acaba de romper, bien porque juega muy pocos minutos, bien porque no tenga el perfil exigible para ser goleador en la primera división. Dicen que el traspaso no fue barato. Su responsabilidad no era pequeña y, casi desde que llegó, se le colgó una especie de cartel sobre su dorsal que invitaba a chacota. Es decir: Babá, antes incluso de jugar, ya estaba amortizado como futbolista sevillista. Cosas como estas suelen pasar en el fútbol. En el nuestro, quizás, más que en otros.
Si todo hubiera quedado en eso, en un jugador de expectativas que jamás rompió en la felicidad multicolor que nos transmitiría con su juego y goles, el caso no hubiera tenido mayor recorrido. Un jugador más de los muchos que pasan por nuestra casa, se va y, posteriormente, triunfa lejos o se pierde en ese dédalo inextricable que es el laberinto del fútbol. Quizás por la acumulación de frustraciones anuales y por la vuelta a la dura realidad del hermoso sueño que vivió el sevillismo arrebatadamente años atrás, a Babá se le convirtió, antes de jugar un partido completo, en una especie de muñeco de feria, una diana para el más doloroso pim-pam-pum que practica, con ventaja sobre otras, esta ciudad: el escarnio. Desde el propio seno de la afición nervionense se propagó una consigna en twitter para ver qué tuits reflejaba mejor la impericia futbolística del senegalés. Y en esa montaña de mensajes el humor dio paso a la descalificación y esta al linchamiento. A Babá lo mataron hace unos días en la red social. Con el veneno que mejor sabe elaborar los cristales en la barriga del sevillano: esa combinación letal entre el humor y la humillación. Absolutamente letal.
Lo más grave del caso es que fueron los suyos, los sevillistas en una amplia mayoría, quienes firmaron esos mensajes. El fuego amigo fue verdaderamente destructivo. Y sus consecuencias para la imagen de una afición no pueden ser más negativas: el sevillismo se ríe de los suyos. Sus seguidores se mofan de uno que se viste de blanco y juega en su equipo. ¿Qué se puede pensar en España de la lealtad innegociable que une al aficionado sevillista con sus jugadores? ¿Cómo queda de dañada esa imagen casi militar tan envidiada de que nuestra afición es un guerrero más que acompaña sin reservas la batalla de sus jugadores? No es nueva la situación. De Nervión hemos visto salir llorando a don Enrique Montero. Y hasta al mismísimo Jesús Navas se le abrió cierta campañita de grada porque centra mal y todo lo que corre es para nada. Somos patológicamente insaciables. Despreciablemente voraces.
Nadie tiene derecho a dejar inédito el de expresión. Quiero decir que uno y cada uno de los sevillistas que entiendan que Babá no es el futbolista que iba a hacernos olvidar a Luis Fabiano, por ejemplo, tiene derecho alguno a callárselo. Al revés. Debe de ejercerlo y criticar por el bien del Sevilla. Pero nunca de la forma tan lacerante, despectiva y sarcástica con la que el otro día, en twitter, linchamos al negro Babá. Una cosa es subrayar las carencias y otra, muy contraria, convertirte en Jaimito. Eso no se hace con uno de los tuyos, con un jugador que, a estas alturas, previsiblemente, esté luchando contra los demonios generados por tanta mala guasa. Tratándose de explicar qué ha hecho él para merecer tanto y tanto desprecio de los suyos. Si yo fuera Babá me daría vergüenza no ya saltar al campo. Sino incluso salir a la calle y pasear con mi mujer. Lesionado en su autoestima, parte del sevillismo, en los idus de marzo, le destrozó el otro día la triada del alma a un jugador que defiende nuestra camiseta. Dudo que el mejor gabinete siquiátrico que frecuentaba Woody Allen en Nueva York pueda recuperarlo alguna vez para vestirse de futbolista. Al menos en Nervión.
@JFelixMachuca
Creo que debería haber quedado claro que la mofa con Baba no es por cómo juega. Es porque no juega.
Como tantos otros hashtag humorísticos (#pelisconbarcenas #salvoalgunacosa #porranombrepapa) el de Baba tiene un carácter de denuncia.
La gente critica, no que Baba juegue mal (que yo creo que no podemos saber mucho como juega) sino que el Sevilla haya pasado de tener delanteras del tipo Kanoute-Luis Fabiano-Negredo o Kanoute-Luis Fabiano-Kerzhakov-Chevanton o Kanoute-Luis Fabiano-Kone-Chevanton o Kanoute-Luis Fabiano-Saviola-Kepa a la delantera actual Negredo-Baba en la que Negredo juega el 95% de los minutos y Manu del Moral lo restante.
La gente critica que con dos entrenadores distintos, en equipos con pobres resultados, siendo el otro único delantero centro de la plantilla y en un conjunto que además no ha sido muy goleador ni en este año ni en el anterior, Baba solo juegue un poquito más que yo.
No os extrañeis si el siguiente hashtag va sobre lo bien que centra Stevanovic… en el wordperfect.
Antes que nada agradecer públicamente a J.Félix Machuca que haya elegido este humilde blog para dar su opinión por tan candente tema. Un abrazo y espero que no sea la última vez.
Es evidente que, en muchas ocasiones, el humor es hiriente y que la delgada línea roja que separa el bien del mal es tan fina que resulta inapreciable. Por otro lado está claro que cada uno tenemos nuestro listón situado en un sitio y, donde uno ve escarnio, el de al lado puede ver guasa y arte. Donde uno ve que es una pasada, el de al lado dice que no es para tanto. Los valores de cada uno son los que son y uno se afloja los agujeros del cinturón lo que estima necesario.
Muchas imitaciones, pero muchas, resaltan lo peor del imitado. Los defectos son elevados hasta el infinito para hacer gracia, con independencia de que la persona se pueda ver humillada por ello. ¿Estigmatizamos, no sé, a La Cámara de los Balones por ello? ¿A Los Morancos? yo pienso que no puede ser así.
En este caso, básicamente, pienso que el problema deriva de que todo se ha escapado de las manos. La intención de los chavales que iniciaron esto es pasar un rato simpático buscando gente con arte, guasa y gracia. Yo, sinceramente, cuando leí eso de «¿a qué sabe un ñu en manteca?» es que no podía parar de reír. Pero claro. Lo que era una broma «controlada» de unos pocos colegas tornó en desmadre y avalancha. Lo que era un hastag con cierta «afluencia twitera» en Sevilla tornó a TT nacional. Ni Rajoy, ni el cónclave, ni los ERES, ni Bankia, ni nada. La pregunta a Babá. Ole. Y claro: cuando la cosa pasa de 20 a 20.000, pues siempre te encuentras gente que no entiende de qué va el tema y que han escrito cosas asquerosas y repulsivas. Pros y contras de esta maravillosa barra de bar que es Internet.
De todas formas, tampoco vamos a negar la realidad ya que esto lo hemos visto aquí muchas veces. Pero más que de Montero o Navas, más que de crítica y pitos, yo veo cachondeo del tipo de Aranalde, Míchel (exAt.Madrid), Magallanes, Mosquera, Mornar, Cordón o Rubén Vega por decir alguno. La diferencia es que ahora está el altavoz de las redes sociales aunque, para mi, pocas cosas hay con más inquina que el runrún y el cachondeíto del Pizjuán cuando salta al campo algún jugador de este estilo.
Y dos cosas tangenciales para acabar, que estoy escribiendo más que el articulista:
1ª, de fútbol. Ahora que el viento va en contra es el momento de decirlo. Que Babá no va a jugar nunca en el Manchester United no hace falta que me lo diga nadie. Pero a mi me gustan ciertas cosas que le veo a Babá. Me parece un jugador aprovechable y, ni de lejos, un bulto con ojos como mucha gente lo ve. Y espero que lo demuestre (aquí de ser posible aunque la dificultad es hoy mayor que la de ayer)
2ª, general. Aunque creo que lo de Babá ha sido una pasada, del mismo modo digo que en los tiempos que corren es necesario desdramatizar ciertas cuestiones, que no hay que cogérsela siempre con papel de fumar y que en demasiadas cuestiones montamos montañas de arenas de algunos granos, consiguiendo un efecto Streisand tan descarnado como este que estamos viendo ahora
Reiterando las gracias a Félix y a los comentaristas que enriquecen el blog, me despido ASEGURANDO que la próxima vez que Babá salte al campo (normalmente segundo tiempo de Zaragoza), la ovación que le va a tributar Nervión se va a escuchar hasta en Palmete. Al tiempo. Conoceré yo a mi afición…
El «gol» de Cardeñosa, el de Abreu, Mornar, Colusso, Kukleta, Carlao, Perdomo, Edwing Congo, Tren Valencia y un larguísimo etc de burlas, cachondeo e imaginación en modo puñetero sobre las calidad o falta de ella…. es lo que hay, va en el sueldo (que no es poco) lo único reprochable es el insulto, la xenofobia y demás cosas inadmisibles.
Si no aguanta esa presión que se dedique a otra cosa, todo esto se lo ha ganado a pulso por ser tan poco competitivo y generoso en el esfuerzo…. si hasta lloro por no marcar!! Anda ya, que no vale para esto.
Oigan si me lo permiten me voy a poner un poco serio en la medida de lo posible.
Está claro que lo de Babá se nos fue completamente de las manos, Álvaro lo describe perfectamente en su comentario, por lo que no añadiría ni una coma, pero es que ahora parece también que de repente para un sector del sevillismo Babá es el Pelé de Senegal. Pues aquí sinceramente les diría un gran y un sonoro ¡¡Y UNA POYA!! pero como he dicho que me voy a poner un poco serio omitiré dicho comentario.
El problema no es que Babá sea malo, regular o bueno, yo sinceramente y mira que tengo debilidad por este tipo de futbolistas (incluso tengo la camiseta de Babá, comprada por 15 pavos, porque le pedí una a él y me dijo que la tenía comprometía… ¿¡Comprometía a quién?!!?, total que al final me la compré en una de estas ofertas que saca el club) es que uno lo ve en el campo y sabe que algo chirría. No me vale que si Luis Fabiano al principio también fallaba. No. A Luis Fabiano tu lo veias y podías pensar que era un flojo, que estaba teniendo mala suerte, pero la calidad que tenía se le veía a leguas, a ver quién me dice lo mismo sobre Babá. Es como lo que se decía de su técnica del automarcaje ¡¡joder, es que es verdad!! ¡¡fijaros!! está solo con opción a desmarcarse y se pega al defensa contrario ¡¡siempre!!.
El problema principal de Babá no es él mismo como jugador de fútbol, es que se ratea al Tottenham para traer a Giovanni do Santos (que si es un pedazo de jugador) por un millón de euros para que al final te manden a tomar por culo y de repente pagas 3,5 millones por un senegales que no lo conocen ni en Senegal, (y esto no lo digo de coña, que al poco de ficharlo estuve en la Casa de Senegal que está en los corralones y los notas me dijeron que no lo conocían de nada y) esto no es la primera vez que pasa en los últimos años, ahí tenemos como se quiso exprimir al West Bromwich por Borja Valero para al final pagar más dinero del que pedían por el madrileño para traer a Guarente, entonces ¿Qué es lo que pasa? Uno se quiere imaginar que el hecho de que para traer a un jugador el hecho de que haya comisiones o que trinque uno, otro o el Grupo inversor de turno no tiene nada que ver, pero es que últimamente estamos viendo tanto mamoneo que uno no sabe que pensar en realidad… y es un mosqueo.
Por otra parte cierto sector de la afición no deja de ser muy novelero. Me viene a la cabeza como por ejemplo cuando el 95% de la afición estaba «mosca» con Mosquera (menudo juego de palabras…) y había un run run costante sobre él, de repente y porque al extraordinario zaguero colombiano le dio por amenazar de muerte a un periodista la gente se puso a su favor como si fuera el mismísimo Juan Arza. Oiga pues no. Que porque un colombiano, un serbio o un senegales vista la camiseta del Sevilla automaticamente no se gana el respeto, la admiración ni la inmunidad por parte del respetable, que eso hay que ganarselo en el campo y en otros sectores y el africano precisamente no es merecedor de tal privilegio en este momento ¿Qué es eso de que porque sea jugador del Sevilla hay que defenderlo ciegamente? Entonces imaginemos que por ejemplo un jugador del Sevilla (dios no lo quiera) le da por asesinar a su familia o a un directivo le da por hacer piruetas con dinero público ¿También hay que defenderlo a muerte? Nanai de la china. La lealdad a los jugadores tienen que ganarsela ellos, no es gratis y menos viendo como se trata a los que verdaderamente somos leales al Sevilla FC en los últimos tiempos. A mi que no me vendan un «decálogos del buen sevillista» y menos iluminados del palo que a los 5 minutos de irse un jugador de la plantilla despotrica sobre el mismo y señala ante sus acólitos a su señora.
Por cierto, que Mosquera tras aquella polémica con el periodista salió de titular contra el Mallorca y marcó un golazo que el público celebró con un estruendo que no recordaba o desde el gol de Magallanes (si es que al final somos guasones por naturaleza), por lo que si yo estuviera en el pellejo de Emery pondría a Babá de titular el domingo. Hat trick SEGURO. Además no creo que nadie se queje por esa decisión, el senegalés tiene ahora muchos fans…
Se me olvidó escribirlo, el gol de Mosquera fue anulado por un árbitro carente de corazón.
Completamente de acuerdo con este último comentario, ahora va a resultar que porque un jugador se ponga la camiseta del Sevilla vamos a tener que defenderlo si o si aunque sean tan indolentes como el Babá este o Mosquera. Pues no estoy de acuerdo, el apoyo y el cariño de la afición hay que ganarselo con el sudor en el campo y de eso Babá (y otros como Stevanovic, Manu del Moral, etc) saben bien poco.
Que después a nuestra afición se le maltrata, se le ningunea y se le señala como delincuentes con fotitos en el carnet y no hay tantos sevillistas indignados como con el Babá este que no es ni será NADIE en el Sevilla FC porque el único motivo de su fichaje es que trincara quien tenga que trincar y eso lo sabemos todos.
Con esto no defiendo que haya habido comentarios fuera de lugar con este jugador que son censurables al 100%, pero si los sevillistas se quieren cachondear de él que lo hagan. Igual que él y los que lo ficharon lo está haciendo con nostros, que parecemos tontos.
Poco que añadir a lo que ha dicho Álvaro.
Fenomenal gamberrada que se ha ido de las manos y que ha dejado momentos de guasa y momentos de estulticia. Como casi todo en la vida.
Sí me gustaría resaltar que la dimensión que tuviese se ha multiplicado por bastante por el simple hecho que un periodista de los de verdad, con renombre y sevillismo acreditado haya decidido escribir sobre el tema.
Creo que si alguien tiene ganas de sacar conclusiones sobre lo ocurrido en twitter, bien haría en analizar el estado de impotencia, incredulidad, desilusión y desorientación del sevillismo, que le lleva a pagarla con el más débil.
Y la víctima de todo esto dentro de una semana seguirá teniendo el mismo problema, que los entrenadores no lo ponen ni siquiera para sustituir a un Negredo que a partir del minuto 70 no puede con las calzonas o para meterle algo de presión al acomododadísimo vallecano. Porque el autentico drama de Babá es que en una plantilla con dos delanteros, es el tercero.
Eso sí, no olvidemos tampoco que con todo y con eso, la víctima de todo esto, pasado el tsunami de las redes sociales, seguirá viviendo mejor que el 90% de los españoles y el 99,5% de sus compatriotas.
No quiero tampoco seguir mucho con el asunto de Babá, porque sinceramente estoy un poco saturado de tanto Babá estos días, pero si me gustaría puntualizar un par de cositas respondiendo a este y a un par de comentarios más que he leido.
En primer lugar, agradezco y muy mucho que en general y salvo en algún comentarista en el blog de Alvarado (donde si no), la gente en general no nos haya señalado ni responsabilizado de la reciente popularidad en twitter de Babá (¿hubiera llegao por si solo a ser TT algún día?), entendiendo por lo general que fue una broma que obviamente en un momento determinado se fue de madre y que bueno poco podíamos hacer al respecto. Gracias a dios, porque hubiera sido muy coñazo seguir con el tema. Obviamente comentarios racistas o fuera del tono más puramente de la coña puramente deportiva pues son censurables, creo que en general no hablamos de esto y se sobreentiende, quién lo haya utilizado para ello pues mal palo le den.
En segundo lugar y en relación con el comentario al que respondo, he leido muchas críticas a los periodistas por haberse hecho eco del HT de Babá, solo por esto. Críticas que sinceramente no me parecen correctas. Hoy en día twitter es quizás una de las mayores fuentes del periodismo, cosa que se convierte en trending topic, cosa que produce una noticia (ahí tenemos por ejemplo el celebérrimo «Gracias Sara» que salió en todos los medios de comunicación), ¿En cuantas publicaciones encontramos referencias a twiiter en montones de noticias? por lo que es lógico que si un elemento noticiable del deporte sevillano se convierte en TT nacional pues que los medios se hagan eco de ello, sincerameente no me parece un escarnio público hacia Babá, si no simplemente seguir la actual tendencia de las fuentes de los medios de comunicación.
Saludos y gracias por prestarme este espacio para poder comentar este asunto!!
En el post y en los comentarios se han dicho verdades como puños. Muchas, muchísimas, y son estas parte de la explicación de por qué está tan quemada la afición sevillista.
Ahora bien, me averguenzo, si queréis lo repito más alto ME AVERGUENZO de la gente que utiliza eso para justificar un linchamiento público, un escarnio, la verdadera porquería en que se ha convertido esto. Me parece verdaderamente increíble que haya gente, humanos, a los que no le llegue la razón para diferenciar entre la crítica profesional, el cachondeito sano y el escarnio personal. Y me parece lamentable que, encima, me quieran hacer comulgar con ruedas de molino.
Cuando leí en el blog de colussos-contra-kukletas la idea de extrapolar con Babá lo que se hizo con Downing en el Liverpool, me pareció algo divertidísimo. Las primeras reacciónes fueron para partirse la caja. Estaba muy bien, sobre todo viniendo de un blog donde el humor se lleva por bandera. Pero en lo que se convirtió luego…, una vergüenza. Una verdadera vergüenza.
No se trata de defender a nadie por ser del Sevilla. Ya digo que me estuve descojonando con este tema hasta que se pasó de la raya. Digo que hay que respetar a las PERSONAS, vengan de donde vengan. Criticar a los futbolistas por su bajo rendimiento es lógico. Y a quienes trajeron a los futbolistas, también. Pero, por muy mal que rindan, nunca NUNCA se puede entrar en el plano personal. Si yo mañana pongo a escribir en mi blog a un chaval con síndrome de Down, seguramente le saldrá una patata de artículo. Y, con justicia, se podrá criticar lo mal que lo ha hecho. Y con justicia también, se me podrá criticar a mi por poner a ese chaval ahí. Pero de ahí a meterse con él en lo personal, utlilizar sus defectos para reírse de él, joder, es que de eso a lo otro va un mundo. Sé que es una exageranción, pero se trata de eso. De pasar a criticar el lamentable juego de un futbolista a lincharle entrando en temas personales.
Y no, eso no se justifica con nada. Con nada. Las críticas profesionales, sí. Y las bromas al respecto, también, hasta cierto punto. Pero lo otro no. Esto fue divertido al principio, lamentable luego y un vergonzoso escándalo al final. El respeto por el prójimo es imprescindible en las sociedades. Si perdemos eso, estamos acabados. Y en este asunto se ha perdido. Una cosa son unas bromitas y otra que la burla se convierta en TT nacional. Una cosa es que a un niño le gasten una broma en su clase y otra que todo el colegio le señale con el dedo y se ría de él a continuación.
Puedo poner miles de ejemplos para explicar que tomarse las cosas con humor es muy sano, pero que hay que saber donde está el límite entre lo que resulta simpático y lo que no tiene ni puta gracia.
Y este asunto no tiene ni puta gracia. A mi me da vergüenza.
Un saludo.
Por cierto, mi enhorabuena al bueno de Alvaro por tomarse esto de esa forma tan diplomática. Explica perfectamente lo ocurrido sin necesidad de levantar la voz. A mi hay veces que cuando me indigna algo, no soy capaz de comportarme de ese modo tan comedido. No tengo ese don.
Que ha habido comentarios geniales y dignos de la guasa sevillana, con sentido del humor y retranca, no hay duda, pero que todo esto perdió su esencia inocente para convertirse en un escarnio zafio…, también.
Se trata de un problema de límites y los humanos tendemos tendencia a no ponderar ni las acciones ni las reacciones. ¿Qué mal existe que yo me tome una cerveza en el estadio para comerme el bocadillo? Ninguno, pero resulta que hay otros que lo aprovechan para el exceso y eso produce la limitación de mi moderado derecho. ¿Qué mal hay en una broma inocente sobre un jugador del Sevilla o del Iliturgi si no atenta contra su integridad? Ninguno, pero qué ocurre si se va de las manos hasta llegar a zaherir, pues que se convierte en una humillación consentida.
Si a esto le unimos el desánimo de la afición por la situación deportiva, la locura de los horarios, los precios, el deterioro de la plantilla, las redes sociales y…, dos huevos duros, obtenemos un guiso que es repulsivo y que sólo sirve para alimentar a los buitres.
Yo me niego a dar carta de naturaleza a esta actitud porque el cariz que ha alcanzado entiendo que es dañina con la persona, con el futbolista, con la entidad, y con la afición a la que pertenezco, y si me tengo que posicionar porque así lo demanda la situación, me tengo que aguantar sin la cerveza porque la idiocia abunda.
Tampoco se soluciona este asunto ni restándole importancia ni convirtiéndose en un cruzado de la ética pública. Yo entiendo que es muy simple, se trata de decir simplemente no. No con mi anuencia, no con mi apoyo, no con mi omisión.
Yo he visto a Baba jugar, y no tiene confianza, juega muy mal el poco tiempo que juega y por eso el entrenador no lo pone a jugar mas tiempo….
Yo siemplemente lo mandaria al Sevilla Atletico o a otro club de segunda a coger confianza porque creo que en el actual Sevilla tiene muchisima presion y no va a jugar bien.
A ver. Una cosita. No es necesaria para quien me conoce, pero vamos a ir dejando claro algunos aspectos.
Ni por asomo, pero ni por asomo, este sitio va a admitir descalificaciones, comentarios despectivos y/o insultos para con nadie. Por otro lado tampoco va a ser un sitio donde los comentaristas se van a poner a hablar, discutir, entre ellos. Para esos menesteres, Internet da múltiples barras de bar (foros, twitter). En este sitio, sobre la base de un artículo, comentamos cosas que nos interesan a los que por aquí paramos. Pero jamás se va a admitir un cruce de pareceres en tono despectivo. Sitios donde abundan las calificativos insidiosos y soeces se encuentran con suma facilidad. Si alguien busca Sálvame blogosferil Sevillista se ha equivocado de canal
Por tanto, el que venga aquí con esas intenciones, le rogaría que por respeto al articulista y al resto de los lectores se abstuviera de actuar de semejante forma.
Gracias